domingo, 30 de mayo de 2021

La refundación de Teror y su relación con el desembarco de una gran familia judía en Gran Canaria a fines del siglo XV

LA REFUNDACIÓN DE TEROR Y SU RELACIÓN CON UN DESEMBARCO JUDÍO EN GRAN CANARIA A FINES DEL SIGLO XV

Faneque Hernández Bautista y Juan Ramón García Torres





Para redactar estas notas hemos buceado en el artículo de Rumeu de Armas publicado en AEA nº 29 (1983) titulado El Marqués del Buen Suceso, habiendo consultado asimismo las fuentes originales citadas por dicho historiador que se conservan en el Archivo Histórico Nacional de Madrid (Fondos del Consejo Supremo de la Inquisición: legajop 1503 nº 4) bajo el epígrafe: “Informaciones hechas en la Inquisición de Canaria como para familiar de ella a don Juan Naranjo y doña Antonia Hernández Naranjo, su mujer. 



Dichos papeles contienen el documento llamado “Galdona” (folio 21 del expediente): 

“Asimismo aparece un papel sin fecha y sin firma, con una marca a lo mayor que dice Galdona, que dice lo siguiente: Enrique Díaz vino de España con su mujer y familia que pasaban a Las Indias. Por contratiempo aparecieron en esta isla. Al querer hacer viaje se les detuvo por falta de familias que había en las tierras. Tuvieron siempre la estimación de personas nobles y se retiraron al lugar de Teror…”


Aclaramos a los amantes de la genealogía canaria que el término Galdona se corresponde con el apellido de Domingo Galdona, el padre del primer Arencibia que llega a las islas desde la lejana Ondárroa, el vizcaíno don Miguel de Arencibia, uno de cuyos hijos, Juan de Troya Galdona, nacido en 1569, vecino de Teror, casará a fines de siglo con María Travieso. Quizá sea este personaje el responsable de la redacción de dichas notas, de ahí su denominación.

Indagando sobre posibles lazos que pudieran justificar ese recuerdo familiar de los Arencibia, hemos comprobado que un hijo del tal Juan de Troya Galdona llamado Miguel de Arencibia Travieso, como su abuelo, casó en Teror con Ana Rodríguez en 1628. Esta Ana Rodríguez resulta ser hija de Luis Rodríguez y Jerónima Díaz, nieta por línea materna de Pedro Díaz y Beatriz Peláez (o Álvarez), bisnieta de Anrique Díaz, esposo de Juana Gómez, y tataranieto, según nos descubre Leonardo Arencibia en su libro "Diego Hdez y la Mora de Argel" , del prócer Anrique Díaz Yánez, persona a la que parece estar referida la cita en dicho documento

La probabilidad de un viaje de evasión conjunta de unas familias judías que embarcan en puertos de Andalucía con rumbo a la América profunda (Tierra Firme) y recalan por azar en Gran Canaria es por tanto una hipótesis verosímil que cuenta con apoyo documental que merecería ser objeto de un estudio más profundo. 





Deduciendo cosas a partir de dicho documento, estimamos que la embarcación que recala en el Puerto de las Isletas en torno al año 1497 pudo ser fletada colectivamente por judíos galaico-portugueses que, huyendo de la quema tras la expulsión de los judíos decretada en 1496 por el rey de Portugal, deciden, desde sus bases en el norte de Extremadura, organizar una expedición hacia América para recalar forzadamente en el puerto de Las Isletas. Habiendo desembarcando en la isla mientras se repara la nave, son retenidos y, tras intensas negociaciones, aceptan quedarse en la isla con la promesa de las autoridades de asegurarles repartimientos en las zonas boscosas de las medianías norteñas y otro tipo de prebendas para refundar, junto con otros pobladores, la villa de Teror. Hablamos de refundación en la medida en que sabemos que Aterure fue un poblado indígena que quedó abandonado tras la conquista de la isla en 1483.

La persona a la que se refiere el documento del desembarco y que parece estar, por su preeminencia, al mando de la expedición es  el portugués Enrique Díaz Yánez (Enriquiánez).

En 1499 este prócer, Enrique Yánez, fue elegido, conforme al fuero de la isla, alguacil y personero de Gran Canaria y ya en 1503 consta en su meteórica carrera política como alcalde mayor de la isla. Estas son algunas de las contrapartidas probables que obtuvo para quedarse en la isla como poblador junto con su familia y el resto de familias que formaban parte de la citada expedición. Cebrián Latasa en su obra magna (Ensayo para un diccionario de Conquistadores) nos da amparo en estas conjeturas haciendo una breve reseña de Enrique Yánez como persona de incierto origen que además de ostentar los cargos citados obtuvo importantes repartimientos de tierras y aguas, pasando a ser un miembro del heredamiento de Firgas. Consta en el libro primero de bautismos de El Sagrario de Las Palmas que Anriquianes en su esposa Lucía Déniz tuvo como hijos en Gran Canaria a Juan en 1503, a Pedro en 1506 y a María en 1513 aunque nos dice Leonardo Arencibia que antes de su arribada a Gran Canaria Anriquianes contaba con descendencia, no sabemos si del mismo matrimonio entre otros el ya citado Anrique Díaz.


Una embarcación que se dirige a Indias no puede ser fletada por una sola familia por poderosa económicamente que esta sea. Tuvieron que ser diversas familias, aunque emparentadas entre sí, antes, durante y después del viaje, las que se decidieron a dar el salto. Entre ellas, las que portan los apellidos Díaz, Yánez, Henríquez, Lorenzo y Falcón establecidas en Teror que dicen proceder de Extremadura aunque Montehermoso fuera tan solo una estación de  paso en su periplo de huída hacia Indias que termina por azar en tierras canarias.

Estamos pues ante un hito extraordinario de la genealogía isleña sobre el que hasta ahora nadie ha hablado, que nosotros sepamos, y sobre el que convendría ciertamente hacer algunas recapitulaciones. El impacto de dicha colonización pactada tuvo que ser radicalmente importante en la conformación del poblamiento insular en las medianías norteñas, especialmente en la villa de Teror. Quizá a partir de ahora pueda empezar a valorarse en mayor y mejor medida las improntas judaica y lusitana de nuestra original idiosincrasia como canarios.

1 comentario:

  1. Qué inteesante y enriquecedora la historia de la familia judía que llega a Canarias en el siglo XV. Gracias por aportar historia y documentación

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